domingo, 19 de septiembre de 2021

instagram y la felicidad

Hace ya casi un año que cerré mí Instagram. Hace menos de una hora lo volví a abrir... ¿Para qué? Eso me preguntó yo.

Primero fue para seguir a un chico... Un ayudante de una materia que mandó un mensaje de despedida y pasó su Instagram artístico. Primero lo seguí con el mío artístico pero me rechazó... dos veces, entonces tomé la horrible decisión de reabrí el mío personal.
¿Por qué horrible? No tiene nada que ver con el chico porque todavía no lo seguí, en cambio, entré a stalkear las cuentas de mis amigos, esas que no veía desde hacía meses porque me hacía mal pero, y sí, me daba un poco de curiosidad, debo admitir que sobrevivía bien la verdad...hasta que entré a mirar.
O son todos muy felices o yo estoy muy triste y en comparación todos me parecen felices, de cualquier manera me termine deprimiendo más. 

Hasta acá nada nuevo la verdad, no lo iba a cerrar de nuevo, iba a esperar unos días, a ver cómo venía la onda pero me puse a mirar algo que me hizo peor. Mí propio perfil.

Nunca fui de subir muchas fotos, menos mías, pero desde el 2012 hasta el 2019  tengo algunas y pucha che, que feliz parezco. Lo peor de todo es que nunca me recuerdo muy feliz en general, pero veo esas fotos y no pienso de mí lo mismo que pienso todos los días. 
Veo esas fotos y un poco me arrepiento de querer cortarme el pelo...

Veo esas fotos y me veo feliz pero no soy feliz y no siento que en algún momento pueda serlo, no me imagino siendo feliz, viviendo tranquila, solo me veo triste y angustiada...

Decidí volver a cerrar mí Instagram, total, iba a seguir a un chico que jamás en su vida me iba a mirar...






viernes, 10 de septiembre de 2021

No me quiero juntar con mis amigos.

Durante esta pandemia dónde se le arruinaron los planes a todos, dónde la vida se detuvo por casi dos años... Se arruinaron los planes? La vida se detuvo? 

Bueno, para mí sí, pero para mis amigos no.

Tengo de todo, miren, la que se fue a vivir afuera, el que cambio de trabajo, los que cambiaron de trabajo, el que hizo una maestría, las que se mudaron, la que consiguió novio (y aparentemente el amor de su vida), el que puso su emprendimiento.

Y yo? Yo acá, haciéndome a la idea de que lo único que voy a hacer en esta vida es cuidar a mis papás, la que no consigue un trabajo ni aunque sea la última persona sobre la tierra, la que jamás tuvo ni tendrá novio, si antes era fea imagínense ahora, si antes era gorda...

No quiero ver a mis amigos y que me cuenten de todas las cosas lindas que les pasaron en estos dos años mientras yo me dormía llorando todas las noches. No quiero ver a mis amigos y volver a mí casa llorando porque tienen lo que yo quiero tener pero jamás voy a conseguir. No quiero tener que contarles lo triste que estoy porque hoy mí vida es una porquería y no pinta mucho mejor.

Mientras ellos se mudaban, viajaban, se casaban, emprendian, cambiaban de trabajo, yo lloraba porque me superaba la angustia del futuro triste que me espera.

Todo tuvieron en sus vidas algún cambio positivo mientras yo sigo dando pasos para atrás.